Pistas para saber si tienes gingivitis y armas para curarla
La encía es un tejido blando y delicado que recubre la base de nuestros dientes. Los protege y soporta a la vez evitando que experimentemos movilidad o hipersensibilidad dental, entre otras patologías. Es una parte de nuestra boca que a veces descuidamos en el cepillado, aunque es de suma importancia prestarle la máxima atención y limpiarla con suavidad para no acumular placa dental. Cuando esto ocurre podemos contraer gingivitis, una infección periodontal de tipo leve que, de no tratarse, puede derivar en una periodontitis, otro tipo de infección más grave que puede comprometer la supervivencia de las piezas dentales afectadas, además de afectar a tu salud general.
En este post queremos ofrecerte algunas pistas para detectar si tienes gingivitis, así como una serie de armas para luchar contra ella. Si evitamos o atajamos ese primer estadio de infección será mucho más difícil que pueda complicarse y desembocar en una periodontitis.
¿Cómo reconocer una gingivitis?
Encías enrojecidas.
El color natural y saludable de las encías es un rosa pálido. Observa si tus encías tienen un color enrojecido porque esa será una primera señal a tomar en cuenta ante un posible caso de gingivitis.
Encías inflamadas
. El enrojecimiento del que hablábamos en el primer punto es la consecuencia directa de una inflamación. Hay pacientes que refieren dolor o malestar al limpiarse las encías y dejan de hacerlo por miedo a empeorar la situación cuando lo cierto es que es más bien al contrario.
Sangrado de encías al limpiarte los dientes.
Puede que no te hayas comprado el cepillo de dientes adecuado, pero en la mayor parte de los casos el hecho de que al escupir la pasta de dientes veas sangre quiere decir que tienes gingivitis. Esta es una de las pistas más inequívocas y razón suficiente para ir al dentista a hacerte una revisión. Sensación de frío al cepillarte los dientes o comer algo frío, caliente o dulce. Cuando las encías comienzan a retraerse debido al avance de la infección, queda al descubierto parte de la dentina, la parte más sensible de nuestros dientes que está conectada directamente con la raíz por medio de numerosas terminaciones nerviosas. Ante esa falta de la barrera natural, nuestros dientes reaccionan de manera exagerada ante ciertos estímulos como el frío, el calor o los sabores dulces y agrios. Sensación de dientes más alargados. Esta es una fase bastante preocupante de la gingivitis porque puede estar anunciando un principio de periodontitis. Las infecciones periodontales destruyen el tejido de la encía dejando al aire buena parte del diente que siempre debe estar cubierto. No es que los dientes crezcan, sino que se pierde encía con todo lo que esto conlleva: movilidad dental, mayor acumulación de placa dental, presencia de sarro y una pérdida de estética en la sonrisa.
¿Qué hacer para curarla?
Higiene bucodental tras cada comida. No pospongas el cepillado de dientes tras cada comida. No hace falta que sea inmediatamente, pero sí dentro de la hora posterior a haber ingerido alimentos o bebidas (exceptuando el agua). La limpieza debe ser sistemática y concienzuda incluyendo dientes, encías y lengua durante 2 minutos.
Elige bien tus armas de limpieza
. Puedes optar por un cepillo manual o eléctrico. Lo importante es que las cerdas sean de tipo medio y el cabezal te facilite llegar a todos los dientes. Es especialmente importante repasar la línea de la encía. Para ello, debes inclinar ligeramente el cepillo con un movimiento suave. Recuerda que mayor fuerza no significa limpieza más profunda. Te recomendamos el uso de hilo dental para eliminar la placa dental en los espacios interdentales. Sobre los colutorios y las pastas dentífricas especiales, nuestra sugerencia es que lo hablemos primero para dar con el producto que mejor se adapte a tu caso.
Hazte una revisión dental anual. Una revisión dental anual te permitirá saber si hay algo que mejorar en tus hábitos de higiene dental o si, por el contrario, tienes una boca de envidiar. Te aseguramos que hay muchos pacientes a los que felicitamos por su preocupación en mantener sanos sus dientes.
Una limpieza dental profesional solo si el dentista lo recomienda Es un tratamiento que nos permite mantener una buena salud dental, pero solo debe recomendártelo el dentista. No siempre es necesaria, pero sí lo es, no la dejes para otro momento. Siempre es mejor prevenir problemas futuros sometiéndose a un tratamiento profiláctico que tener que vértelas con una periodontitis.