5 respuestas claras acerca del blanqueamiento dental
Es uno de los tratamientos estéticos dentales que más se conocen y de los que más se hablan últimamente. Seguramente tú también has leído muchas cosas acerca del blanqueamiento dental y hasta puede que te hayas planteado consultarnos la posibilidad de hacerte uno. Te felicitamos si, en primer lugar, has decidido que el lugar más apropiado para realizártelo es tu clínica dental de confianza. Has acertado y te vamos a explicar por qué. Aunque blanquearse los dientes parece algo inofensivo y hasta venden pastas de dientes en farmacia que nos prometen resultados, lo cierto es que, y esta es la primera respuesta que tienes que tener clara, tu dentista es el único profesional capacitado para acometer un blanqueamiento dental con garantías de éxito y con una total seguridad. Además, te dirá si está indicado en tu caso o debemos pensar en otras alternativas para aclarar tus dientes.
Esta es la segunda respuesta que no suele subrayarse lo suficiente y es que no todos los problemas se solucionan con un blanqueamiento dental. Un buen tratamiento -desconfía si no es así- siempre empezará con una revisión completa de tu boca y una limpieza dental. Necesitamos una boca sana y limpia. ¿Te imaginas, por ejemplo, tener un problema importante de acné y querer taparlo con capas y capas de maquillaje? Hacer un blanqueamiento dental cuando no toca, por así decirlo, es algo parecido.
Como te decíamos, no siempre podemos aclarar los dientes con esta técnica. Por ejemplo, si tienes algún diente desvitalizado, es decir, si te han practicado una endodoncia, la respuesta es que ese diente será resistente al blanqueamiento externo y para tener resultados visibles tendremos que hacer lo que se conoce como un blanqueamiento interno accediendo a través de un pequeño agujero a la cámara pulpar y colocando la solución blanqueadora (generalmente perborato de sodio o de peróxido de carbamida) durante un tiempo. Personas que han sido tratados durante mucho tiempo con medicamentos con tetraciclinas también lo tienen complicado con los blanqueamientos dentales, aunque tienen soluciones a su alcance como las carillas dentales estéticas. Afortunadamente, cada vez hay menos personas que estén en este grupo.
Somos conscientes de que la estética dental es cada vez más importante, pero te aconsejamos no obsesionarte con la blancura de tus dientes. No existe el blanco puro en unos dientes porque nuestro color natural de base tiende más al marfil que al blanco. Sabemos que es una tentación dejarse llevar por lo que vemos en la televisión y en las revistas, pero lo mejor es tener un aspecto natural. En ese sentido, si crees que es necesario hacerse un blanqueamiento dental todos los años, la respuesta es no. De hecho, con unas buenas pautas de limpieza y acudiendo a tus visitas de mantenimiento podrás alargar la vida de este tratamiento.
Por último, otra de las respuestas que más tenemos que dar es si un blanqueamiento duele o tiene efectos secundarios. No tienes por qué sentir dolor ninguno y, de hecho, una de las zonas que se protege para evitar daños colaterales son las encías. Lo que sí puede producirse es una sensibilidad dental pasajera. Otra de las ventajas de tener a mano a tu dentista es que si ves que no se te pasa, podrás consultarnos en cualquier momento.
